EL PASADO HA ALLANADO EL CAMINO HACIA EL FUTURO
Nos hemos embarcado en un viaje en el tiempo y hemos llegado allí donde todo comenzó: Chemin des Tourelles, la pintoresca calle suiza que fue la cuna del patrimonio de Tissot durante muchas décadas.
En nuestro regreso, no hemos re – parado en esfuerzos para dar nue – va vida a un clásico: el Chemin des Tourelles de 2023. Déjese maravillar por cada matiz de este reloj, por cada detalle elaborado con maestría, por su caja pulida que resplandece bajo la cúpula protectora de cristal de zafiro. Fíjese bien en la hipnotizadora danza que ejecutan las agujas, de acabado pulido con chorro de arena.
Los estilizados índices se curvan y brillan con una sutil elegancia que susurra calma y confianza desde el borde de la esfera. ¿Y el latido? Es el ritmo de un movimiento mecánico automático. Es más que un regreso: es un renacimiento. El Chemin des Tourelles, clásico a la par que contemporáneo, es un símbolo de superación que transita entre el ayer y el mañana.
El camino de ayer, la inspiración de hoy
Abriendo nuevos caminos
La campaña Chemin des Tourelles reinventa las reglas. Un espectáculo trepidante en el que la tradición se une a la energía en estado puro. Por momentos, suave y asertivo; al instante, un toque enigmático.
En el vertiginoso mundo actual, la versatilidad es la reina y hemos acudido a su llamada. El Chemin des Tourelles se presenta con orgullo como un accesorio que camina con su portador a través de los altibajos de la vida. ¿Le parece un mero reloj de pulsera clásico? Es mucho más que eso. Nos dirigimos a los progresistas, a los conocedores del estilo, a quienes saben apreciar la unión de la fiabilidad suiza con los aires modernos.
La magia se revela en la versatilidad de la colección. Cada pieza es distinta, con variaciones que van desde los tonos de la esfera hasta el tipo de pulsera, pasando por los números y detalles sutiles como el motivo «clous de Paris». Estos elementos se combinan para crear una mezcla de encanto clásico y atractivo moderno que Tissot ha perfeccionado durante generaciones. Así es el Chemin des Tourelles: eterno, perenne, en continua evolución.
Donde la historia resuena, el futuro susurra
